domingo, 3 de noviembre de 2013

Vivos o muertos

“La ciclotimia es un trastorno del estado de ánimo que provoca altibajos emocionales (a veces varios cambios en un mismo día), pero no tan extremos como en el trastorno bipolar”

Desde hace muchos años, yo no lo supe hasta hace pocos, parece ser que soy ciclotímica. Y digo que no lo sabía porque aunque yo no era consciente de esos cambios y del daño que generaba en mis padres (en mi madre sobre todo), que no sabían tratarme, así como de que yo también lo pasaba mal sin saber por qué. Supongo que ellos debieron documentarse por su cuenta y un día mi padre me lo explicó y entendí todo mucho mejor. Con el paso del tiempo y mi llegada a la edad adulta, bastante estabilidad personal y emocional y el conocer lo que me pasaba parecía que todo había remitido, hasta el punto de, pensaba yo, desaparecer (ya no recuerdo cuándo tuve el último episodio) puesto que desde hace tiempo estaba bastante estable; tan estable que ya nada me emociona ni me entristece, no siento especial alegría al ver a gente que quiero o en ambientes agradables, ni me afligen las despedidas o las situaciones de tristeza. Sé reconocer el ambiente positivo o negativo, pero me resulta imposible tener sentimientos positivos o negativos hacia absolutamente nada, hasta que he descubierto el motivo: ¡va a resultar que estoy muerta! Si, esa estabilidad que he alcanzado, donde más o menos tengo el control de todo, no es un estado lógico en vida, y lo sé porque pude responder, sin dudar, a cada una de las preguntas siguientes:

Pero tengo que decir una cosa: no es tan malo estar muerto en vida. Vale que no sientes ni padeces, pero es más cómodo. Y yo siempre fui muy vaga en lo que a mi misma respecta

A veces

A veces, sólo a veces,  me estimulo lo suficiente como para pensar en escribir.
De esas veces, sólo algunas, termino lo que empiezo. Y sólo algunas tiene unidad.
De esas pocas veces, puntualmente, me gusta lo que ha salido.
Y sólo algunas, consigo que coincida con lo que tenía en mente.
De todas esas veces, que ya son muy poquitas, algunas, las cuelgo en este blog.
Pero nunca, nunca, nunca, las enseño.
Y (casi) nunca, nunca, nunca, hablan (apenas) de mí.

Hasta hoy. 

Porque octubre ha sido un mes extraño.
Porque me han pasado cosas y porque he tenido las circunstancias adecuadas para pensar.
Porque el cargo de conciencia de llevar sin escribir ¿años? estaba pudiendo conmigo.
Y porque la inspiración me ha venido al dormirme y se ha quedado conmigo hasta el despertar


Y dicho esto, ya puedo quedarme tranquila otro par de años más

domingo, 3 de febrero de 2013

Si estuvieras en mi día a día

Si estuvieras en mi día a día todo sería tan fácil…

Si estuvieras a mi lado los días malos como hoy, no lo serían tanto.
Discutiríamos como siempre y nos reconciliaríamos como nunca.
Quedaríamos para tomar café y lo alargaríamos hasta la cena porque sabes que el tiempo va a otra velocidad cuando estamos juntos; se detiene y no pasa, haciéndonos infinitos.

Si estuvieras en mi día a día cogeríamos el coche cuando me vieras agobiada, nos meteríamos en carretera por la noche y dejarías los kilómetros pasar mientras yo tan solo te miraría y no haría falta hablar; somos iguales y con mirarnos de tendríamos claro que nos queremos, aunque nunca nos lo hayamos dicho.

Si estuvieras en mi día a día, no vivirías tan lejos;
compartiríamos locales y encuentros entre amigos.
Sería más fácil ponernos al día.
Volveríamos a las calles, como aquellas noches que nos comíamos el mundo y a tu lado nada sería peligroso ni desconocido

Hoy te he visto un rato (nunca el suficiente) y me has dicho que tal vez, a lo mejor, dentro de un tiempo te vas; te conozco y sé que es verdad, que te irás aún más lejos y aunque sea para que estés mejor, yo me quedaré a este lado y solo con pensarlo ya me duele echarte de menos.

A ti, que sin ser eso que busco eres mi mayor apoyo, por "todo lo que podríamos haber sido tú y yo si no fuéramos tú y yo"

martes, 11 de diciembre de 2012

Lo complicado de separarse y compartir la ciudad

Cuando dos personas que tenían una relación rompen toca hacer inventario de propiedades y reflexiones y volver a pensar en singular.
Los recuerdos en conjunto conviene guardarlos por separado, hablar en primera persona sobre las experiencias conjuntas y enfrentarse a la nueva realidad: vuestros rincones no dejan de ser una intersección de dos calles cualquiera, su calle es una división entre edificios y los lugares a los que solíais ir simplemente  son negocios que cerrarán si las cosas no van bien, al margen de lo que hayan guardado sus paredes.

Una ruptura es la oportunidad de hacer limpieza, de tirar lo que te sobra y deshacerte de lo que te molestaba; tanto de sus defectos como de tus malos hábitos. Ahora puedes hacer borrón y cuenta nueva.

Sin embargo, hay cosas que no podrás afrontar por ahora, como repartiros los amigos comunes, esos que no saben dónde meterse porque sienten que os traicionan y es tu obligación no tomártelo como una guerra fría. También es doloroso tener que recordar la situación cuando algún conocido te pregunte por él sin saberlo y tengas que decirle que ya se acabó y, lo peor de todo,  pretender huir lo más lejos que puedas de donde sabes que estará; tan lejos que te lo encuentres, porque él está haciendo lo mismo, y no sepas ni si saludarle o girarle la cabeza porque ya no sabes estar en su presencia ni tienes ganas de saber de su vida.

Pero tranquila, que todo se pasa. Algún día te acostarás totalmente exhausta de tanto llorar su ausencia y a la mañana siguiente, cuando el autobús te deje bajo su casa al volver de tu nuevo trabajo, pasarás pensando en la prisa que llevas y no te dará tiempo a pensarle. Otro día encontrarás una vieja foto de los dos y, lejos de dolerte, te reirás de la cara que pusiste. Y quizás al día siguiente coincidas con su familia, les preguntes como están y no te acuerdes de él. Y así, poco a poco, con un poco de suerte, desaparezca por completo de tu vida y no le necesites nunca más. Cuando te des cuenta que ese día ya había pasado y que llevas tiempo respirando como quieres, habrás superado lo complicado de separarse y compartir la ciudad.



Por Laura. Algún día tú también volarás a donde quieras


lunes, 4 de junio de 2012

Me mudo

Desde (según pone en youtube) el día 16 de enero de 2009 que me abrí una cuenta en youtube para un par de videos que había grabado en un concierto, poco a poco le fui cogiendo el "vicio" a eso de grabar y al yaqueestágrabadoporquénosubirlo y eso pasó a yaqueestásubidoporquenohacerlopúblico, hasta el punto que he cambiado mi rumbo de vida y ahora tengo el mundo audiovisual como objetivo profesional
Han sido más de tres años en los que he ido a incontables conciertos y conocido innumerables canciones y versiones y se acumulan un total de chorromil visitas (¡gracias!) y 2303 videos subidos; de los que hay públicos 1252 de muchos artistas, cantantes, estados de ánimo y sonidos. Con estas cifras, que son bastante altas para un particular; porque mi forma de grabar ha cambiado bastante desde el principio (empecé con una cámara de fotos en la mano y sabéis que ahora voy cargada de cables y trastos) y también por seguridad (youtube me va mandando a veces aviso de coincidencias de copyright y no es plan que me cierren la cuenta) he decidido poner un punto y seguido así que….

¡abrimos un nuevo canal! 
En plural, si, porque es para quien lo quiera disfrutar

No voy a quitar el anterior, simplemente dejaré de subir al de los ‘sugus de colores’ y tendréis que buscar las novedades en uno con pompas (intento de un diseño más “elegante”), que suena mejor y que también espero irá viéndose mejor.
Ahora mismo está vacío del todo, está muy triste pero poquito a poco, igual que el otro, se irá llenando de música, así que a partir de hoy 4 de junio, los nuevos contenidos estarán en 

www.youtube.com/user/endegarciavideos

Pasaros cuando queráis :)
ende